Cuando un jugador abandona el fútbol deja mucho más que sus pases, sus goles o sus actuaciones. El legado del deportista es mucho más que eso. Los primeros días de noviembre Alejandro Togachinsco se despidió de ese mundo, el gran 10 de la verde y blanca dijo adiós a una brillante carrera como jugador de fútbol mayor, una vida que lo liga a Club El Expreso y que seguirá formando parte de la institución, hoy como entrenador de divisiones menores y la coordinación de las mismas, con un objetivo muy claro: trasladar a esos niños lo que a él le enseñaron.
Formado en las inferiores de Club El Expreso, Togachinsco se marchó muy joven a Club Atlético Rafaela, luego a Argentino B, Gimnasia de Santa Fe, Unión de Súnchales, volviendo a la Liga Departamental San Martín en el año 2011 de la mano de Club Piamonte y regresando en 2012 al club de sus amores.
En la nota con Como Somos nos habla de los llamados que recibió para jugar en el exterior, de grandes amigos, de sus recuerdos, del vínculo y los pase gol que hacía con Denis Stracqualursi jugando para Unión de Súnchales, de cómo con tan solo 24 años llevó la cinta de capitán o el gol del 2016, entre otros temas.
Una persona humilde, trabajadora y que valora las cosas sencillas del día a día y su familia. Un gran ejemplo para todos los jóvenes futbolistas que se quieren dedicar a esta profesión.
Se fue un jugador, pero queda el legado del deportista que con sus valores hacen más grande el deporte del fútbol.









