El fallecimiento del Papa Francisco ha dejado un profundo vacío, y en El Trébol, los recuerdos de su cercanía y calidez perduran. Julia Baratti Bosio compartió con nosotros sus vivencias y emociones tras la partida del Sumo Pontífice, recordando especialmente el histórico encuentro de la delegación de El Trébol con el Papa en el Vaticano.
«El domingo lo vimos deseando felices Pascuas, y el lunes recibimos esta triste noticia», expresó Julia, aún conmovida. «Me pidieron que recordara el día que fuimos a la audiencia papal con la delegación de El Trébol hace unos años. Le habíamos llevado un regalo en nombre de nuestra ciudad».
El momento cumbre de aquel viaje fue cuando Jorge Meynet y Dante Bosio, tuvieron el privilegio de entregar el presente. «Desde lejos, vi la emoción cuando Francisco se les acercó, recibió el regalo, les tomó las manos y los bendijo», relató Julia. «Cuando me encontré con Dante, estaba tan conmovido que me contagió ese sentimiento».
Julia destacó el valor simbólico del rosario bendecido que Dante recibió del Papa. «Lo llevó siempre consigo, incluso en terapia intensiva, y lo acompañó en su partida», compartió con emoción.
Si bien Julia no pudo vivir de cerca ese momento específico, recordó con especial cariño su encuentro personal con el Papa Francisco meses después de su nombramiento. «Estuvimos entre la gente, pero tuvimos la suerte de que pasara muy cerca nuestro», narró. «Verlo, un argentino, bendiciéndonos y rodeado de banderas argentinas, fue muy emocionante».
«Según dónde le toca a uno estar y cómo vivirlo, es como uno lo siente»,reflexionó Julia. «De todos modos, hoy siento su partida y me preocupa lo que va a venir».