El 8 de diciembre de 1991 marcó un hito en la historia de El Trébol con el inicio de un servicio de transporte urbano de pasajeros. Fruto de un acuerdo pionero entre el municipio y la Cooperativa de Provisión de Agua Potable y Otros Servicios Públicos, esta iniciativa representó un paso significativo en la mejora de la movilidad de los habitantes de la ciudad.
Lamentablemente, esta experiencia no perduro en el tiempo y después de varios años dejó de funcionar.
Este acontecimiento, sin embargo, no surgió de la nada. El Trébol ya había tenido un primer acercamiento al transporte público urbano en 1927, cuando un audaz emprendedor de apellido Dodero, anticipándose a su tiempo, puso en marcha un servicio rudimentario. Con un Chevrolet adaptado como ómnibus y pintado de un llamativo color claro, Dodero ofrecía un recorrido que partía del negocio de la familia Battaini, ubicado en Santa Fe al 500, y se extendía por las principales arterias de la ciudad, culminando en la estación ferroviaria. Lamentablemente, esta experiencia pionera no perduró más allá de un año, debido a diversas dificultades que llevaron a la quiebra de la empresa.